En el mes de enero un porcentaje bastante alto de la población entra en un estado de trance o sonambulismo, ellos son... los estudiantes!
El año nuevo trae consigo, además de falsas promesas e intenciones, los primeros exámenes. Durante este mes todos los zombi-universitarios, sólo tienen en la cabeza una palabra: estudiar.
Y es que el efecto que producen estas "futuras promesas del mundo laboral" en las ciudades es un vacío altamente perceptible en las noches del fin de semana.
Por suerte yo aún no soy universitaria, lo único que me trae a mi enero son las recuperaciones del trimestre pasado, y el comienzo de unos tres meses que se me harán interminables.
El impacto que causa la palabra vacaciones sobre los profesores es, cuanto menos, curioso: mandan leer libros, hacer trabajos, leer trabajos, hacer libros... (uy perdón, lo último no suelen hacerlo...), a sabiendas de que cuando esas vacaciones terminen, su trabajo se multiplicará por dos o tres o cuatro...!
Una confesión: no suelo hacer la mayor parte de los "deberes" que encargan. En cierto modo... sigo mi propio criterio: si el trabajo merece la pena, se hace y sino no (bueno, llámalo criterio... llámalo leydelmínimoesfuerzo... ejem). Un ejemplo de trabajo que mereció la pena: leerse la tragedia de Hamlet. He aquí la prueba:
Por cierto, mi "etapa zombi" será dentro de 60 días aproximadamente. Marzo, ¡allá vamos!
¡¡Que la suerte nos acompañe!!

Datos personales

- Mae_mia
- Las únicas personas que me agradan son las que están locas: locas por vivir, locas por hablar, locas por sentir...
jueves, 15 de enero de 2009
Enero...
Pensado y escrito por Mae_mia 2 opinionesmartes, 20 de mayo de 2008
Por encargo
Pensado y escrito por Mae_mia 3 opinionesHoy tengo la entrada hecha gracias a Petit Bonbon*.
Hace unos días me pasó un "meme" por su blog y, aunque no sé muy bien qué es, si que sé lo que debo hacer y, además, la idea me ha gustado: debo contar 7 "cosas" sobre mí.
A veces las cosas más sencillas son las mejores.
Ahí voy:
1.- Me gusta pensar que las cosas saldrán bien. Siempre se puede ver el vaso medio vacío, pero ¿por qué amargarse si se puede ver también medio lleno? No es lo mismo tener días malos, que vivir en un estado permanente de 'bajón'.
Todos preferimos ver una sonrisa que un llanto, ¿o no?
2.- Vivo en un caos permanente y, lo mejor de todo, es que me gusta. Las normas, los horarios... es algo que siempre he odiado. Supongo que siempre he vivido a mi rollo y que, a estas alturas, vengan a decirme lo que tengo que hacer... no me gusta un pelo. Ya sabéis: '¡Anarquía y cerveza fría!'
3.- Quiero ser diferente. Nunca me ha gustado seguir la moda de turno y más si me parecía una solemne estupidez. Distinguirte de la gente es algo que aprecio de verdad y mi máxima siempre ha sido esa y, aunque en muchos aspectos no la haya conseguido, seguiré luchando por no ser como el resto del rebaño. Supongo que el peor insulto que me pueden decir es que soy normalita.
4.- (El Robocop :P) La televisión, el mayor invento de la humanidad (en aspecto de ocio, claro). Creo que podría decir que soy (o más bien, era) una adicta a este aparatito, porque aunque desde este último verano en adelante la haya dejado un poco de lado, mis 3 ó 4 horitas de tele dirarias no me las quita nadie. Es probable que tantas horas invertidas frente a la pequeña pantalla me hayan hecho decidir con más seguridad hacia dónde quiero dirigir mi vida y, en concreto, mis estudios.
En este apartado tengo que nombrar al mejor programa que he visto en toda mi vida y del que me siento orgullosa de decir que formo parte de su foro (aunque lo tengo un poco abandonado): Buenafuente.
5.- Me considero una persona cultural. El arte, la música, la literatura... me interesan de manera notable, ya sea de grandes artistas o de principiantes (con talento), me parece digno de admiración que alguien sepa plasmar una idea en un papel o cualquier otro elemento. Y si encima tiene estilo, ¿qué más se puede pedir?
6.- Adoro viajar. Vivir en una ciudad amurallada hace que me sienta asfixiada muy a menudo y alimenta mis ganas de salir de este pueblucho. Eso sí: ¡NO a los viajes organizados! Si se viaja es para conocer los aspectos que más vayan contigo del lugar que visites. No quiero tener sólo una hora para comer, ni quiero tener una tarde entera de compras en un centro comercial a las afueras. Quiero poder quedarme toda una tarde en un parque al aire libre, dormir hasta que me echen de la habitación del hotel, pasarme horas y horas dentro de un museo o una librería, pasear por las calles sin ver nada en especial, sin prisas, sin preocupaciones.
7.- Mi autoestima viaja en una montaña rusa. Necesito rodearme de buena gente, que me ayude y a la que pueda ayudar, y saber que no soy una inútil total. Tener creatividad y sorprender a la gente son dos valores que me encantan y que, por desgracia, no poseo.

Título: "Sonría, por favor"
Autor: Andreu Buenafuente
Fuente: Captura.org
Continúo con el juego y les paso la pelota a los siguientes blogs: